Hacer ejercicio y sudar durante los meses más cálidos puede ser excelente para la salud, pero también puede aumentar el riesgo de sufrir daños en la piel. Los expertos recomiendan un protector solar de amplio espectro, resistente al sudor y con un FPS de 30, especialmente para hacer ejercicio al aire libre.
El protector solar resistente al sudor y al agua está diseñado para permanecer en su lugar durante la actividad y la sudoración. Asegúrate de que tu protector solar sea resistente al agua, con una duración mínima de 40 minutos y un FPS de 30 o superior.
Durante el ejercicio, se debe reaplicar el protector solar al menos cada dos horas, y con mayor frecuencia si se suda mucho o se nada. Incluso si el protector solar es resistente al agua, puede desgastarse por la fricción, el sudor o la exposición al agua, lo que reduce su eficacia.