Es posible que su certificado de nacimiento muestre 65 años, pero su cerebro podría estar funcionando como si fuera diez años más joven (o más), dependiendo de las experiencias y hábitos que dan forma a su vida diaria.
Un equipo de la Universidad de Florida informa que el optimismo, un sueño regular y de calidad, los vínculos sociales sólidos y otras influencias positivas similares están estrechamente relacionados con perfiles cerebrales más saludables. Sus hallazgos indican que el estilo de vida y el manejo del estrés pueden influir significativamente en el ritmo del envejecimiento cerebral, incluso en personas que viven con dolor crónico.
"Estas son cosas sobre las que las personas tienen cierto grado de control", afirmó el Dr. Jared Tanner, profesor asociado de investigación en psicología clínica y de la salud en la Universidad de Florida y uno de los líderes del estudio. "Se puede aprender a percibir el estrés de forma diferente. Dormir mal es muy tratable. El optimismo se puede practicar". Más información: https://www.sciencedaily.com/releases/2025/12/2512 1 4100933.htm
