De niños, muchos abríamos nuestros regalos de Navidad y salíamos corriendo a montar nuestra bicicleta nueva o a darle un golpe al bate de béisbol. Esta Navidad puede hacer ejercicio y pasar tiempo con sus hijos jugando con ellos. Un estudio de la Facultad de Medicina de Harvard descubrió que jugar con sus hijos es una forma efectiva de quemar el exceso de calorías.
La investigación reveló que, al jugar moderadamente durante 30 minutos, un adulto de 70 kg quema 149 calorías. Al aumentar un poco la energía y jugar vigorosamente, esta misma persona puede aumentar su consumo de calorías a 186. ¡Solo recuerde regalarles a sus hijos algo con lo que ambos puedan jugar al aire libre!
