Un simple paseo por la calle es una excelente manera de comenzar una rutina de ejercicios con su mascota. Comience con una caminata rápida de 5 minutos dos veces al día para ayudar a que sus piernas se muevan y su ritmo cardíaco aumente y poco a poco comience a aumentar la duración o incluso conviértalo en un trote ligero una vez que la rutina se haya solidificado. Recuerde, incorporar ejercicio en el día a día de su mascota puede ser un compromiso tanto para usted como para ella; ¡Tener un horario de caminata diario regular los ayudará a ambos a mantenerse encaminados!
Si su perro se lleva bien con los demás, una visita al parque para perros local es otra excelente opción de ejercicio. Tu perro puede correr con sus amigos cachorros, quemando toda la energía, mientras tú tienes tiempo para relajarte al margen. Muchos parques para perros también tienen un área separada para que los perros más pequeños jueguen lejos de la fuerza y velocidad de algunas de las razas más grandes que existen.
Jugar a buscar es una excelente manera de ayudar a que su perro salga a correr. Puede utilizar un juguete para perros diseñado para lanzar, o simplemente una pelota de tenis, un disco volador suave o incluso un palo grande. Puede que al principio sea necesario un poco de prueba y error para descubrir qué es lo que más le gusta perseguir a tu mascota, pero el juego en sí es muy instintivo para muchos de nuestros amigos caninos, ¡así que trata de no rendirte!
Si te gusta correr por tu vecindario, intenta llevar a tu perro. Es posible que ambos necesiten algunas carreras para sincronizar sus pasos, especialmente si su perro no está en forma, pero después de un tiempo, sus carreras pueden convertirse en una experiencia de unión muy tranquila y llena de ejercicio.
