La vitamina B3 puede ser el secreto simple y de venta libre para reducir el riesgo futuro de cáncer de piel. Desde 2015, los dermatólogos han recomendado a muchos pacientes con antecedentes de cáncer de piel que consideren tomar nicotinamida, un tipo de vitamina B3. Esta recomendación se basó en un ensayo clínico con 386 participantes, que reveló que quienes tomaron nicotinamida desarrollaron menos casos nuevos de cáncer de piel que quienes no la tomaron.
Hasta ahora, confirmar estos hallazgos previos en una población mucho mayor ha sido difícil. Dado que la nicotinamida es de venta libre, su uso rara vez se documenta en los historiales médicos. Para superar este obstáculo, los investigadores recurrieron al Almacén de Datos Corporativos del Departamento de Asuntos de Veteranos (VA), donde la nicotinamida figura en el formulario oficial del VA.
Con estos registros, el equipo de investigación revisó los resultados de 33,833 veteranos que recibieron tratamiento inicial con 500 miligramos de nicotinamida dos veces al día durante más de 30 días. Registraron el siguiente diagnóstico de carcinoma basocelular o carcinoma escamocelular cutáneo de cada paciente.
Entre los pacientes estudiados, 12.287 habían tomado nicotinamida, mientras que 21.479 no. Los investigadores observaron una disminución general del 14 % en el riesgo de cáncer de piel entre los usuarios de nicotinamida. En quienes comenzaron a tomar el suplemento después de experimentar su primer cáncer de piel, la reducción del riesgo se disparó al 54 %. Sin embargo, este beneficio disminuyó cuando el tratamiento comenzó después de que ya se hubieran desarrollado múltiples cánceres de piel. El efecto fue más pronunciado en el carcinoma de células escamosas, uno de los cánceres de piel no melanoma más comunes.
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