La piel seca de invierno no es inevitable. Al hacer algunos cambios en su régimen y hábitos de cuidado de la piel, y al usar los productos adecuados, es posible que pueda mantener su piel con un aspecto suave, terso y vibrante durante todo el invierno. Aquí hay algunos consejos:

Cada vez que te lavas la cara, las manos o el cuerpo, despojas a tu piel de sus aceites naturales. Dado que estos aceites ayudan a retener la humedad, es vital reemplazarlos. Por eso es importante usar un humectante cada vez que te laves la piel, especialmente en invierno.

Dados los días de invierno más cortos y la menor cantidad de luz solar, puede ser tentador eliminar el protector solar de su rutina matutina, pero piénselo de nuevo. Incluso en invierno, la dañina luz ultravioleta puede estresar la barrera de humedad de la piel, que es vital para mantener la salud y la hidratación de la piel.

Los tratamientos nocturnos son una excelente manera de revitalizar o prevenir la piel seca. Los emolientes son excelentes para hidratar. Sin embargo, debido a que son un tipo de crema más espesa, su piel puede tardar más en absorberlas.

Los humidificadores ayudan a devolver la humedad al aire, lo que puede ser especialmente útil cuando la calefacción interior está al máximo en los meses de invierno. Tener más humedad en el aire puede ayudar a actuar como un agente humectante natural que, a su vez, puede prevenir y aliviar la sequedad de la piel.

Una ducha o baño caliente al final de un frío día de invierno puede ser especialmente relajante. Pero, para mantener su piel nutrida, es posible que desee mantener la temperatura del agua más cerca de la tibia.

De acuerdo con el Baylor College of Medicine, el agua caliente puede eliminar los aceites naturales de la piel más rápido que el agua tibia (que suele estar alrededor de los 98,6 °F/37 °C) y posiblemente incluso causar daños.

Fuente: https://www.healthline.com/health/wi n ter-dry-skin#dry-skin-prevention-tips

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