Hay cosas (y personas) en la vida sobre las que no tenemos absolutamente ningún control. Es una verdad difícil de aceptar para algunos. Esta negación puede llevar a convertirse en un fanático del control o en una preocupación excesiva. Aquí hay algunas maneras de ayudar a frenar la preocupación.
1. Determine lo que puede controlar.
Cuando se encuentre preocupado, tómese un minuto para examinar las cosas sobre las que tiene control. No puede evitar que venga una tormenta, pero puede prepararse para ella. No puede controlar cómo se comporta otra persona, pero puede controlar cómo reacciona. Reconozca que, a veces, lo único que puede controlar es su esfuerzo y su actitud. Cuando pone su energía en las cosas que puede controlar, será mucho más eficaz.
2. Concéntrese en su influencia.
Puede influir en las personas y las circunstancias, pero no puede forzar las cosas para que sigan su camino. Entonces, si bien puede darle a su hijo las herramientas necesarias para obtener buenas calificaciones, no puede hacer que obtenga todas las A. También puedes planear una buena fiesta; no puedes hacer que la gente se divierta.
Para tener la mayor influencia, concéntrese en cambiar su comportamiento. Sea un buen modelo a seguir y establezca límites saludables para usted mismo. Cuando tenga dudas sobre las elecciones de otra persona, comparta su opinión, pero solo una vez. No trate de arreglar a las personas que no quieren ser arregladas.
3. Identifique sus miedos.
Pregúntese qué teme que suceda: ¿está pronosticando un resultado catastrófico? ¿Duda de su capacidad para hacer frente a la decepción? Por lo general, el peor de los casos no es tan trágico como podría imaginarse. Hay una buena posibilidad de que sea más fuerte de lo que cree.
Fuente: https://www.psychologytoday.c o m/us/blog/what-mentally-strong-people-dont-do/201705/how-stop-worrying-about-things-you-cant-change

• Tags:
• Salud Emocional