Los expertos creen que los cuidadores familiares deben estar atentos a los déficits de memoria a corto plazo de sus seres queridos que plantean problemas de seguridad (por ejemplo, la toma incorrecta de medicamentos). Pero también deben controlar sus propias reacciones emocionales ante los olvidos de la persona a la que cuidan para dejar de hacer comentarios críticos. ¿Cómo podemos afrontar la pérdida de memoria de un ser querido? A continuación, se ofrecen algunas ideas.
• Deja ir tus recuerdos
Olvidar quiénes eran nuestros familiares afectados por demencia no es una opción. Recordamos bien sus personalidades únicas, sus capacidades especiales y sus orgullosos logros, especialmente cuando aún vislumbramos pequeños destellos de quiénes eran durante sus ocasionales momentos de lucidez. Pero para aceptarlos como son hoy y ayudarlos a que hagan lo mejor que puedan, debemos aflojar el control de esos poderosos recuerdos. Considere la posibilidad de utilizar prácticas de atención plena, como ejercicios de respiración y meditación, para entrar de lleno en el momento presente con ellos, incluso si su condición actual le duele. Queremos estar centrados y conscientes, para poder responderles con compasión tal como son, no como eran.
• Modifique sus expectativas
Esperar que un ser querido recuerde los detalles de una conversación o un plan es una preparación para el fracaso o, posiblemente, un guión para dejarlo en evidencia. Es inútil e injusto. Pero eso no significa que debamos tratarlos como niños incapaces. Más bien, debemos ser conscientes de sus crecientes debilidades y brindarles el apoyo justo para ayudarlos a desempeñarse lo mejor posible, tal vez dándoles indicaciones o recordatorios suaves para estimular sus recuerdos.
Piensa en el poder de tus palabras
• Salud y bienestar
Las personas con demencia, especialmente en las primeras etapas de la enfermedad, suelen ser muy sensibles a los errores cognitivos que cometen y se sienten vulnerables a las críticas propias y ajenas. Cualquier juicio negativo que emitamos por preocupación, frustración o irreflexión los traspasará instantáneamente hasta lo más profundo y los despojará de su dignidad. Para apoyar a nuestros seres queridos y fortalecer, en lugar de debilitar, nuestras relaciones con ellos, debemos limitar nuestras correcciones y, en su lugar, señalarles cuando se desempeñen adecuadamente. El refuerzo positivo es un mejor camino hacia el consuelo.
Fuente : www.aarp.org
